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Aquí está mi receta de gougères de queso. Tienen una textura extremadamente sabrosa . Crujientes por fuera, revelan un corazón derretido por dentro. Se pueden hacer de cualquier tamaño, pero yo los prefiero más pequeños, porque así se crujen aún más por el queso de encima. Una pequeña maravilla sencilla de hacer.
-250ml de agua
-250ml de huevos (¡necesitas un volumen para que la pasta choux salga bien! son unos 5 huevos)
-140g de harina
-110g de mantequilla
-5g de sal
-pimienta, nuez moscada
-150 g de queso rallado (¡el emmental no es tan bueno!) + un poco para espolvorear
Precalentar el horno a 180°C.
Poner el agua, la mantequilla y la sal en una cacerola.
Llevar a ebullición a fuego lento.
Añadir la harina de una vez fuera del fuego.
Remover bien (¡incluso con bastante brío!) y volver a poner a fuego lento durante 1 minuto para que se seque la masa. Hay que seguir mezclando. La masa se desprenderá del fondo de la sartén.
Verter la masa en un bol.
Añadir los 250 ml de huevos batidos poco a poco a la masa (removiendo bien cada vez).
Remover enérgicamente para combinar.
Añade el queso rallado.
Añadir pimienta y nuez moscada rallada.
Utiliza una manga pastelera para hacer pequeños montones. No importa la forma, se hincharán.
Espolvorear el queso rallado por encima.
Introducir en el horno y hornear durante 18-20 minutos a 180°C. ¡Disfrútalo caliente! Los gougères estarán crujientes por encima y se derretirán en la boca.
¡Son perfectas para un aperitivo soleado !